jueves, 19 de agosto de 2010

LA CONTAMINACION SONORA ENFERMA:



Quienes vivimos en grandes ciudades experimentamos cotidianamente los efectos del ruido en nuestro estado físico y psicológico: no es casual que el bienestar y la armonía se asocien con el silencio.

La contaminación sonora implica la introducción de ruidos o vibraciones en niveles que produzcan alteraciones o molestias, o que resulten perjudiciales para la salud. Buenos Aires se encuentra entre las cuatro ciudades más ruidosas del mundo.

“Escucha en el silencio y serás sabio”. Proverbio Chino

Ruido y salud
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) los ruidos generan molestia y por eso deben considerarse como dañinos. La exposición constante al ruido deja secuelas físicas y psicológicas.

En varios países del mundo, el ruido es considerado como la primera causa de enfermedad profesional y contaminación ambiental de la cual se quejan los habitantes. A su vez, es una agresión que provoca daño lentamente, pero de manera acumulativa.

El sistema auditivo del ser humano está adaptado para recibir y percibir sonidos y ruidos, pero dentro de un rango de intensidades, si ese rango se supera y la exposición es sostenida, comienzan a producirse efectos nocivos de orden fisiológico y psicofisiológico sobre la salud. A estas patologías están expuestas todas las personas que se someten de manera sostenida a estas intensidades acústicas, ya sea por trabajar con equipos ruidosos (motores, máquinas diversas) o por vivir en centros urbanos contaminados acústicamente.

¿Qué es el ruido?
El ruido es sonido y como tal, desde el punto de vista biofísico se define como el efecto producido en el órgano de la audición por las vibraciones del aire o de otro medio. También desde ese punto de vista los sonidos son armónicos y los ruidos carecen de armonía.

La intensidad del sonido se mide en la unidad Bel, o su forma decimal el decibel (dB). Al silencio absoluto le corresponden 0 dB; una conversación normal genera 60 dB, una intensidad razonable para escuchar música tiene 80dB, un barrio tranquilo tiene 40-50 dB y la calle de una ciudad media alcanza los 80 a 100 dB. En una discoteca el nivel de ruido excede ampliamente los 120-130 dB, del mismo modo suele ocurrir con los equipos musicales portátiles con audífonos.

Contaminación acústica
En la actualidad, las sociedades generan sonidos y ruidos de una variedad, intensidad y perdurabilidad, que constituyen una forma de contaminación física por sus efectos: la contaminación acústica. Por ejemplo: el ruido producido por el transporte aéreo, automotor o por la actividad industrial.

A partir de los 100 dB, si el ruido o sonido es sostenido comienzan a producirse efectos nocivos sobre nuestra salud. Estos se manifiestan como fatiga auditiva, sorderas profesionales, y traumatismos acústicos que conducen a una disminución de la percepción auditiva y en muchos casos a su perdida total.

También la contaminación acústica produce efectos psicofisiológicos que se manifiestan a nivel de alteraciones del sueño, falta de concentración, aumento del estrés, síndromes de depresión y en general disminución de la calidad de vida. La contaminación acústica también afecta a los animales.

Fuentes de ruido
Tránsito vehicular: automóviles livianos.
Tránsito vehicular: locomoción colectiva.
Actividades industriales, comerciales y artísticas.
Actividades de construcción y demolición.
Vuelo de aeronaves (aviones y helicópteros).
Animales domésticos.
Equipos de música.
Pregón de mercaderías.
Bocinas y Alarmas

Qué hacer

1.Promover normas que regulen la producción de ruido, sobre todo en las grandes ciudades y vinculadas al transporte e industria.
2.Minimizar la producción de sonidos y ruidos intensos, recurriendo a elementos para aislación acústica. Existe una gran variedad, tanto para la construcción de viviendas como para la industria en lo que se refiere a tecnología y salubridad laboral.
3.Pensemos antes de tocar la bocina, subir el volumen del estéreo o utilizar máquinas, el ruido que hacemos contamina y nos altera a todos.
4.Usá tapones para viajar en subte o cuando te expongas con frecuencia a niveles de ruido que puedan afectarte.
“El silencio lleva en sí tu voz, como el nido la música de sus pájaros dormidos”. Rabindranath Tagore

Ana Paula Cordero - Focus On-

2 comentarios:

  1. Hola! Estoy bastante interesada en la contaminación acústica y me gustaría saber como afesta esa a los animales, especialmente los de compañía.

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  2. Los animales de compañía, son criaturas sumamente sensibles a los ruidos. La prueba está cuando al llegar las fiestas de fin de año, corren a esconderse muy asustados. Ellos padecen la contaminaciín sonora, más que nosotros absolutamente.

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