sábado, 6 de noviembre de 2010

Ejercicio en la Edad de Oro:


Uno de los campos más fascinantes de la medicina actual refiere al cuidado de la salud de los mayores; hoy se hace hincapié en la prevención y la promoción de la calidad de vida, puesto que, con un buen uso de los recursos disponibles, esta realmente puede convertirse en una edad de oro.

Nuevos medicamentos, nutrición, actividades estimulantes, entre otros, son algunos de los factores que podemos destacar para lograr este propósito; el ejercicio físico es con certeza uno de los mejores aliados para el que busca sensación de bienestar, especialmente para aquellos que han entrado en la madurez.

De todas las opciones, andar es la más universal y no requiere un tratamiento especial, puesto que en la mayoría de los casos, es el propio cuerpo el que marca los límites personales; tiene como ventajas que puede hacerse en cualquier lugar y sin ropas especiales, aunque para no caer en el riesgo de la monotonía, los especialistas recomiendan que puede ser útil andar en companía.

La compañía de otra persona es muy saludable, puesto que reafirma nuestro compromiso con la actividad y puede ser el estímulo necesario que aporte ánimo para continuar saliendo a caminar con regularidad cuando flaquea la voluntad; también puede ayudar el fijarse nuevas metas de rendimiento compartidas cada cierto tiempo.

Caminar no implica un estrés muy grande para el corazón ni para las articulaciones, y como contrapartida, ayuda a mejorar el equilibrio, aumenta la velocidad de desplazamiento, disminuye la sensación de fatiga, protege contra los accidentes cardiovasculares y ayuda a mantener el peso; para sacar máximo provecho de esta actividad, es importante hacerlo en terrenos con un suelo regular, en espacios abiertos y poco contaminados, y con ropa y calzado cómodos.

Aquellos que están en mejor forma física, y siempre buscando el consentimiento médico, pueden alternar la caminata con trotes ligeros; este ejercicio, al ser de mayor intensidad, genera beneficios para el corazón en menos tiempo.

Hay otras actividades ideales para los mayores, como nadar y montar en bicicleta; sin embargo, el caminar, por su facilidad y acceso universal, se presenta como uno de los pilares más destacados a la hora de contribuir a la salud de los mayores… ¡y los no tanto!
Gracias, Pablo querido!

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